Bienvenido/a a esta, mi primera entrada. Como viajera empedernida que soy, no podía ser otro, el tema que te traigo para esta ocasión. No se si habrás viajado alguna vez a París… pero ¿has visitado, concretamente, el cementerio Père Lachaise? Sigue leyendo y te relataré mi visita a Madame Lenormand.
¿Quién fue Madame Lenormand?
Seguramente, si te apasiona el mundo de la adivinación y la cartomancia, seguro ya habrás oído hablar de ella. Si no, seguramente te estarás preguntando ¿Quién fue Madame Lenormand?
Pues fue, ni más ni menos que, la Sibila de Joséphine y Napoleón Bonaparte.
Marie Anne Adélaïde Lenormand, nacida en Alençon (Francia) el 27 de mayo de 1772, fue una adivina francesa muy popular que vivió entre finales del siglo XVIII y principios del XIX. Es quizás más conocida por los historiadores, como una de las consejeras de Joséphine de Beauharnais. Lenormand predijo que, Joséphine sería criada más alta que una reina, y que su marido, Napoleón Bonaparte, entonces un oficial del ejército francés, incluso más alto que un Rey.
Tuvo tanto éxito que, incluso estuvo bajo el escrutinio de los líderes revolucionarios de la República Francesa y de la policía (obviamente, predecir sus muertes en la guillotina no la ayudaron en nada). Por supuesto, fue encarcelada unas cuantas veces, y finalmente fue liberada, pero esta atención mediática solo ayudó a impulsar su popularidad como adivina.
Madame Lenormand vivió la Revolución Francesa, el ascenso de Napoleón y su caída. Vivió de su oficio y, finalmente, murió de vejez en su residencia de París, el 25 de junio de 1843. Tenía 71 años.
Su sobrino, heredando sus pertenencias, decidió destruir cada vestigio de su biblioteca oculta. Se acabaron sus mapas astrológicos, sus tarjetas, sus notas. No queda nada. Lo que sabemos, aparte de los registros policiales, son las reseñas que tenemos de algunos de sus clientes y amigos.
Los editores de la época, tratando de capitalizar la reputación y el nombre de Madame Lenormand, poco tiempo tras su muerte, publicaron oráculos y algunos tarot que, hoy conocemos y que llevan su nombre.
El Cementerio de Père Lachaise
Cualquiera podría pensar que, de visitar París, habría muchos otros sitios muy populares que visitar, que un cementerio. Pero es que el Cementerio de Père Lachaise, es uno de los más populares camposantos del mundo. Para llegar hasta el, debes dirigirte a el número 16 de la Rue du Repos, en el XX distrito.
Como ya habrás adivinado, el motivo de mi visita a este cementerio, era localizar la tumba de varios personajes ilustres. Entre ellos, en mi lista figuraba el mismísimo Allan Kardec, Papus, Oscar Wilde, y por supuesto, Madame Lenormand. Salvo por el caso de la protagonista de esta entrada, sobre los demás, te hablaré en futuras entradas.
El Cementerio de Père Lachaise es el más visitado del mundo. Tiene más de 69.000 monumentos y recibe cientos de miles de visitantes al año. Sobre todo, por la importante cantidad de celebridades que se encuentran allí enterradas. Entre ellas, además de las ya mencionadas, está Jim Morrison, Edith Piaf, María Callas, Fréderic Chopin, Camille Pissaro y muchos más.
El cementerio fue diseñado por el arquitecto neoclásico Alenxandre Théodore Brongniart, en 1803. Sin embargo, la capilla y la monumental entrada principal, fueron construidas por Étienne-Hippolyte Godde. Tras su inauguración, ha sido ampliado en cinco ocasiones: en 1824, 1829, 1832, 1842 y 1850.
Si, tras lo que acabas de leer, ya estás planeando tu próximo viaje, pongo a tu disposición el mapa del cementerio. Este lo puedes localizar en su web, pero, siendo gratuito, desde aquí podrás descargarlo también.
La tumba de Madame Lenormand
Supongo que, ya que te facilité el mapa del cementerio, intentarás localizar la tumba de Madame Lenormand. Pero, siento comunicarte, que no aparece. Posiblemente, no aparece en el listado del mapa porque no es, precisamente, una de las tumbas más visitadas por el publico en general. Sin embargo, no existe cartomante que se precie, que no haya visitado, alguna vez, su tumba. Para localizarla, debes dirigirte a la tercera división, entrando por la puerta principal.
Es evidente que su sepulcro es visitado, por el cuidado, las flores, dedicatorias y oráculos que reposan sobre su el. Pero, a pesar de su popularidad, es una tumba pequeña y que puede pasarte desapercibida entre el resto de tumbas.
No pude desaprovechar la ocasión para, encender unas velas a su recuerdo, regalarle algunas cartas de su “oráculo” y, por supuesto, pedirle que nos conceda el don de la clarividencia. Leer aquellas letras grabadas en piedra “Mademoiselle Lenormand”, fue todo un sueño hecho realidad.
Y así podría resumir cómo fue mi visita a Madame Lenormand. Pero, tal como te mencioné, visité el lugar de descanso de otros tantos personajes, ese día, relacionados con el esoterismo, espiritismo y el tarot. Si quieres saber más curiosidades sobre mi viaje, no te pierdas mi próxima entrada.
¡Hasta pronto!
Encontrar este escrito fue maravilloso! Gracias por escribirlo.